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VACUNACIÓN EN PEDIATRÍA


Las vacunas son preparados biológicos que sirven para prevenir enfermedades infecciosas mediante la activación de nuestro cuerpo para que desarrolle defensas específicas contra esas enfermedades. Las vacunas son capaces de hacer aprender a nuestro sistema inmunológico a saber defenderse. Gracias al calendario vacunal establecido en todas las comunidades autónomas de nuestro país se ha conseguido erradicar muchas enfermedades que eran causante de la muerte en los niños o de graves secuelas derivadas de dichas enfermedades.

1.- ¿Qué son las vacunas?

Son sustancias que se administran a las personas sanas para estimular la producción de defensas (inmunidad) contra un germen determinado, sin los peligros que supone la infección natural. Contienen partes del germen, o sustancias similares producidas en laboratorio, que han sido tratadas para que estimulen la producción de inmunidad sin producir la enfermedad.

2.- ¿Qué contienen?

El componente principal, que se llama antígeno, es esa sustancia capaz de estimular nuestro sistema inmune para producir la defensa específica contra el germen. 
 
Además, las vacunas también contienen:

• Conservantes: para prevenir la contaminación de las vacunas.
• Estabilizantes: evitan la degradación durante su almacenamiento.
• Adyuvantes: sustancia que al incorporarse a la vacuna acelera, potencia y prolonga la respuesta de la inmunidad. 
 
3.-Tipos de vacunas: 
 
a) Según el germen: víricas, bacterianas. 
 
b) Según el estado del germen: vacunas de gérmenes vivos ó atenuadas (el germen se ha debilitado en el laboratorio para que pierdan su capacidad de producir enfermedad) y vacunas de gérmenes muertos ó inactivadas (el germen está muerto, incapaz de producir infección).

c) Asimismo, todas ellas pueden estar formadas por el germen entero, ó una parte del mismo.

4.-¿Cómo actúan?

Para defendernos de los gérmenes, nuestro cuerpo ha desarrollado el llamado Sistema Inmune, que es el conjunto de defensas que tenemos. Las vacunas imitan la capacidad natural de los gérmenes de activar nuestro sistema inmunitario, de tal manera que sin necesidad de enfermar nuestro cuerpo produce defensas específicas contra ese germen.

Según el tipo de vacuna, esta inmunidad nos protegerá un tiempo determinado. Así, las vacunas atenuadas suelen producir inmunidad duradera o prolongada, en algún caso de por vida, mientras que las inactivadas producen una respuesta menos duradera por lo que requieren administración de dosis sucesivas (dosis de refuerzo) a lo largo de la vida.

Además de proteger a cada persona, las vacunas tienen un efecto adicional que se llama inmunidad de grupo. Cuando vacunamos a muchas personas en una población hay un gran número de personas protegidas contra la enfermedad. Esto evita que ese germen circule de persona a persona, y así impide que personas que no se hayan vacunado por alguna razón, puedan enfermar. Por ejemplo, los niños pequeños que aún no tienen la edad para recibir ciertas vacunas, o personas que no se pueden vacunar por padecer ciertas enfermedades. Por tanto, al vacunar a nuestros hijos también estamos protegiendo a otros niños. Este beneficio será tanto mayor cuanto mayor número de vacunados haya en una población.

5.-Beneficios de las vacunas: 
 
Todas las vacunas que se recomiendan en los calendarios de vacunación infantil son seguras. Decir que una vacuna es segura significa que los beneficios que ésta aporta son muy superiores a los riesgos, que en la mayoría de los casos son reacciones leves y pasajeras. El gran beneficio de las vacunas es evitar que padezcamos enfermedades potencialmente graves con importantes secuelas muchas de ellas, frente a reacciones adversas tolerables de las vacunas.

Las vacunas, como cualquier medicamento, precisan cumplir unos requisitos muy estrictos por parte de las autoridades sanitarias antes de ser comercializadas. Este proceso de aprobación comprende un complejo ciclo de varias etapas, en las cuales se comprueba su seguridad, los efectos secundarios, su capacidad de proteger respecto a la enfermedad que se quiere prevenir, etc. Todos estos ensayos clínicos duran años antes de que se apruebe su comercialización. Además, también se vigila la evolución de la enfermedad que se previene, de esa manera se pueden adaptar los calendarios vacunales a la situación de cada enfermedad en cada momento.

6.-Efectos adversos de las vacunas:

Aunque las vacunas actuales son en general muy bien toleradas, no están exentas de reacciones adversas, tanto locales (en el lugar de inyección) como generales (síntomas no relacionados con el lugar de inyección), que en muy raras ocasiones, especialmente cuando son debidas a hipersensibilidad (alergia) a algún componente, pueden revestir gravedad.

a) Reacciones adversas locales: fundamentalmente enrojecimiento e hinchazón en el lugar de la inyección, contrariamente a lo que es creencia generalizada, son más frecuentes a medida que el niño va haciéndose mayor, al depender de la cantidad de anticuerpos en sangre (más altos con las dosis sucesivas de algunas vacunas, especialmente antidiftérica y antitetánica). Su aparición no está relacionada con la presencia o ausencia de historia previa de reacciones adversas con la misma vacuna. El hecho de no haber hecho reacciones a dosis anteriores no supone que en la próxima dosis de la misma u otras vacunas no las pueda presentar.

b) Reacciones adversas generales
 
-Fiebre: La fiebre es un efecto adverso que puede observarse con cualquier vacuna. Suele ser de aparición en las primeras 48 horas después de la vacunación, con excepción de la fiebre relacionada con la vacuna triple vírica (sarampión, rubeola y paperas), en la que aparece entre los 5-12 días después de la administración, y de la vacuna contra la varicela, en la que lo hace a los 14-21 días. Su duración suele ser de un máximo de 48 horas. La fiebre como efecto adverso de la vacunación suele ser bien tolerada en niños y raramente requiere de intervención.

-Síncope post vacunal (síncope vaso vagal, lipotimia, desmayo, desvanecimiento): Es un cuadro de mareo e hipotensión de aparición más frecuente en adolescentes de sexo femenino, y aunque genera una gran preocupación no tiene gravedad ni relación con reacciones de alergia. Suele aparecer en el momento de la vacunación o inmediata después,o a los pocos minutos de la misma, generalmente en los 30 primeros minutos. En caso de síncope el paciente debe reclinarse con las piernas elevadas para favorecer el retorno venoso hasta la desaparición de los síntomas. Este episodio no contraindica sucesivas dosis de vacunación, pero obliga preventivamente que el paciente esté sentado unos minutos cuando reciba vacunas, pinchazos, curas, analíticas, etc.

c) Anafilaxia: Muy raras (1-3 casos x 1.000.000 de dosis administradas), las reacciones graves por hipersensibilidad a algún componente de la vacuna (anafilaxia) pueden poner en peligro la vida del niño si no se reconocen y tratan inmediatamente. Si su hijo tiene alguna alergia, antes de recibir ninguna vacuna debe comunicarlo al profesional sanitario. Síntomas a reconocer: Inicio agudo de síntomas cutáneos, como habones o urticaria (presentes en el 80% de casos) asociados a síntomas generales (respiratorios o circulatorios), que en la infancia pueden ir acompañados frecuentemente de síntomas digestivos (dolor abdominal, vómitos, diarrea), que son un marcador de gravedad

7.-Autenticas contraindicaciones:

Las contraindicaciones están en relación con las situaciones particulares del receptor, y es muy importante que siempre valoremos de forma individualizada el beneficio-riesgo que supone la administración de una vacuna. Una vacuna está contraindicada cuando el riesgo de complicaciones o el riesgo de desarrollar efectos adversos es mayor que los beneficios que produce la vacuna; o bien cuando por la edad o estado del paciente se prevea una respuesta inmunológica escasa o nula. Ante una contraindicación bajo ningún concepto deberemos administrar una vacuna, por el elevado riesgo que pueda producir una reacción adversa grave. En cambio, en caso de una precaución el riesgo de una reacción adversa es menor y se puede considerar la administración en función de la valoración que hagamos de la relación beneficio-riesgo.

Las contraindicaciones pueden ser:

a) absolutas o permanentes
 
-La reacción anafiláctica grave a una dosis previa o a algún componente de la vacuna, es una contraindicación permanente para cualquier vacuna que contenga esos componentes. Los productos más alergénicos que pueden formar parte de las vacunas son los antibióticos (neomicina), las proteínas del huevo, las gelatinas (triple vírica y varicela) y en menos ocasiones la levadura (hepatitis B). 
 
-La presencia de encefalopatía aguda (enfermedad neurológica aguda grave con convulsiones prolongadas y/o pérdida de conciencia y/o signos focales que no son debidos a otra causa identificada), en los siete días posteriores a la administración de una dosis de la vacuna contra tos ferina, contraindica las dosis posteriores de cualquier vacuna que la contenga. 
 
b) relativas o temporales: La gran mayoría.

-Edad de administración. Es muy importante respetar la edad mínima de administración. La edad del receptor puede considerarse una contraindicación. 
 
-Embarazo: Como norma general las vacunas de virus vivos están contraindicadas en el embarazo por el riesgo teórico potencial de provocar lesiones en el feto, a excepción de la polio oral y de la antitifoidea oral. Las vacunas de virus muertos o inactivados en general sí pueden administrarse durante el embarazo sin problemas ya que no existe evidencia de provocar riesgos derivados de la vacunación, pero en algún caso no se aplican porque en algunas no existen estudios que muestren su seguridad en embarazadas. La vacuna antitetánica (a partir del segundo trimestre) la antigripal (en cualquier momento del embarazo) y la vacuna frente a la hepatitis B se aplican frecuentemente en el embarazo.)

-Inmunodeficiencias.: Las vacunas de virus vivos por norma general están contraindicadas en personas con inmunodeficiencias. 
 
-Enfermedad aguda: En el caso de las infecciones agudas, moderadas o graves las vacunas no deben administrarse mientras dure ese proceso. Fiebre muy elevada, crisis asmática grave, cardiopatía o nefropatía descompensadas, etc.

CALENDARIO VACUNAL EN ARAGÓN:



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