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OBESIDAD


La obesidad es un problema de salud, que se ha visto incrementado en los últimos años. En la mayoría de los casos, el origen es multifactorial, interviniendo factores  genéticos, metabólicos, endocrinológicos y ambientales. Sin embargo, la obesidad exógena o por sobrealimentación constituye la principal causa.
Entre los factores ambientales destacan el aumento de la ingesta de alimento, los hábitos de vida, el sedentarismo, la presión social y comercial para ingerir alimentos excesivamente calóricos (como la comida rápida) entre otros, parecen ser los factores más importantes en la etiología de la obesidad hoy en día.

La obesidad, no solamente es algo que se ve a primera vista, sino que puede desencadenar o agravar otras patologías, como la  hipertensión, diabetes mellitus, insuficiencia cardiaca,... Es por eso, que deberemos evitar padecerla, o en caso de estar instaurada, perder peso.

¿Cómo hacerlo? No existe ninguna fórmula mágica, ni dietas milagro, pero con ayuda de nuestro médico de familia será más fácil conseguirlo. Ya que nos puede aconsejar dietas, adecuada a nuestras circunstancias.  Es importante recordar, que la pérdida de peso debe ser progresiva y controlada por un médico.

La primera medida a tomar es cambiar el estilo de vida .Un estilo de vida activo y ejercicio, junto con una alimentación saludable, es la mejor manera de bajar de peso. Incluso una pérdida de peso moderada puede mejorar nuestra salud, y puede notarlo por ejemplo, en si tenía dificultades para caminar, las piernas tendrán que soportar menos peso, y podrá caminar  con más facilidad


Al iniciar una dieta, el principal objetivo es adoptar formas saludables de alimentación que deberemos mantener, ya que sino el peso se vuelve a recuperar. 


Las dietas aconsejadas se denominan dietas de "control calórico"; son dietas equilibradas y completas, manteniendo la proporción de principios inmediatos: 50% de hidratos de carbono, 35-30% de lípidos y 20-15% de proteínas. La reducción calórica se debe valorar en cada caso, teniendo en cuenta la ingesta previa. Como decía el Dr. Grande Covian, " los únicos alimentos que adelgazan son los que se quedan en el plato sin ser consumidos".  En contra de lo que a veces se afirma irresponsablemente, no existen alimentos milagrosos que produzcan adelgazamiento.


Como normas generales para el control de la obesidad, podemos citar algunos alimentos que se aconseja evitar: azúcar y alimentos que lo contengan, bebidas refrescantes, frutos secos, conservas en aceite, grasas animales, queso graso, leche entera y nata, bollería industrial, aperitivos, bebidas alcohólicas, carnes grasas.



Algunos consejos para perder peso:

- Distribuir las comidas a lo largo del día, no dejando más de tres horas entre cada ingesta, porque el proceso de digestión consume mucha energía del cuerpo. Una fruta o un yogur desnatado, pueden ser buenas opciones como alimento para el almuerzo.
- Disminuir la cantidad de alimento a ingerir, por ejemplo comer en plato de postre en vez de usar el plato lleno. Come despacio y disfrutando de los sabores.
- Incluir la mayor cantidad de frutas y verduras posibles en la dieta, ya que contribuyen a dar sensación de saciedad.
- Realice 5 comidas al día
- Vaya a comprar después de haber comido
- Disminuya el consumo d e carnes rojas y aumente el de pescado, pavo, y  conejo.
- No alterne periodos de ayuno, con atracones de comida.
- Evitar el consumo de grasas o productos que la contengan porque tienen un elevado nivel energético(patatas fritas, salsas, rebozados, comidas prefabricadas,…)
- El desayuno debe ser la comida más abundante del día, y a medida que pasa el día la ingesta debe ser cada vez menor en cantidad de alimento.
- Disminuir el consumo de alcohol, ya que aporta calorías vacías que no serán consumidas por el organismo, sino que se acumularán, y contribuirán al aumento de peso.
- El proceso para perder peso tiene que ir por escalones, obteniendo resultados de forma gradual. Los resultados para ser perdurables requieren tiempo y esfuerzo.
- Evitar el sedentarismo. Realizar ejercicio físico diario que contribuirá a perder peso, y a subir la autoestima, mejorando la calidad de vida.
- A la hora de cocinar, prepare la cantidad de comida que se vaya a comer, evitando que sobre, para no repetir plato.
- Evite las bebidas carbonatadas, y en caso de no poder evitarlo, toma bebidas Light.
- Mantenga una buena hidratación.


Ejercicio físico
El ejercicio físico es fundamental para conseguir bajar peso. Se debe hacer todo lo posible para dejen el estado de extrema inactividad, incluyendo en el régimen algún tipo de ejercicio físico moderado.


Modificación del comportamiento
Con ello se pretende, modificar ciertos aspectos del comportamiento alimentario del paciente, que le llevan al consumo excesivo de alimentos. Se pueden usar terapias de grupo, o bien técnicas de autocontrol (realizar un diario de comidas, comer pausadamente sin leer o ver la televisión, así como técnicas encaminadas al aumento de su autoestima, convenciéndole de las posibilidades de alcanzar el éxito), así como el apoyo por parte de su familia.


Tratamiento farmacológico
Puede usarse como complementario al tratamiento dietético, y en determinadas circunstancias. Generalmente se usará bajo supervisión de un especialista en nutrición y nunca podrá ser el único pilar del tratamiento de la enfermedad.


Tratamiento quirúrgico
La falta de resultados por métodos conservadores (dieta, ejercicio físico,…) y el aumento de la incidencia de obesos en los países desarrollados, llevaron a considerar la cirugía como otro posible pilar en el tratamiento de la obesidad.
Debe tenerse claro que ha de ser el último paso en el tratamiento, y que los pacientes candidatos a dicha cirugía han de ser seleccionados cuidadosamente. Actualmente se acepta que aquellos sujetos con un IMC en torno o superior a 40, o superiores a 35 con patología añadida en los que ha fracasado el tratamiento conservador, con unas condiciones psicológicas y familiares adecuadas, son subsidiarios de tratamiento quirúrgico.

En resumen, la pérdida de peso es posible, pero requiere esfuerzo, dieta, motivación y control por un médico. No existen dietas milagro, pero sí pequeños trucos que hacen que las dietas sean más llevaderas (en vez de mantequilla en las tostadas, ponga aceite de oliva; en vez de patatas fritas coma ciruelas o cerezas; en vez de bebidas carbonatadas tome zumo natural,…). Y recuerde la pérdida de peso es por su bien, ganará en calidad de vida, en salud y autoestima.



Bibliografía y enlaces:






 Dra. Eva Mª Senra de la Fuente


Comentarios

  1. Muchas gracias Dra. Senra, un tema muy apropiado para los propósitos de septiembre.

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